🌸Bienvenid@🌸
Cuando era más joven, odiaba los días nublados:

me daban una sensación de tristeza, nostalgia y ahogo que no podía soportar.
¿Y qué hacía entonces?
Me quedaba en casa encerrada y aún más triste por no poder estar al aire libre (y cerca de la naturaleza).
Hace unos años, esto cambió, y tengo la certeza de que fue por dejar de consumir alimentos proinflamatorios y que mi tiroides volviese a estar más regulada (pero esa es una historia para otro día).
Porque la percepción tan negra que tenía durante esos 🌥🌥 días cambió, y empecé a pasar todo lo que podía al aire libre: tanto si hacía sol como si estaba nublado y oye, los días nublados también tienen su encanto y se merecen un corazoncito: no solo porque los verdes se ven más verdes, sino por los beneficios que te cuento aquí mismo ⤵️
La exposición a la luz natural mejora el estado de ánimo, relaja, reduce la ansiedad y minimiza síntomas como la depresión estacional, al aumentar los niveles de serotonina. Y esto, aunque te cueste creer, también sucede en los días que solo ves nubes poblando el cielo.
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No importa si el día está encapotado o hace un sol que apenas ves tu propia sombra: tu cerebro percibe la luz natural y esto ayuda a que se regule el reloj interno de tu cuerpo.
¿Qué pasa entonces?
Pasa que mejoran tus patrones de vigilia-sueño.
Y no hace falta que te diga que si descansas bien por la mañana te despertarás con energía, no necesitarás, sí o sí, el café ☕ matutino, y no comerás por comer.
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¿Sabías que los días nublados bloquean gran parte de la radiación solar, y es más seguro estar al aire libre? Y como es más seguro puedes estar un poco más de tiempo sin protección y así absorber la vitamina D: esencial para los huesos y el sistema inmune.
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La exposición a la luz natural y sin gafas 😎 (cosa que es más fácil si no hay sol), reduce la fatiga visual y mejora la salud ocular a largo plazo: esto pasa porque nuestros ojos también necesitan absorber y asimilar la vitamina D. Aunque si quieres seguir usando tus gafas, pero no quieres perder visión (y quieres estar protegida de la radiación solar), te invito a visitar mi IG @elisa_healthyharmony y conocer más detalles
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Según estudios que menciona el profesor Adam Alter: durante los días nublados pensamos con mayor claridad y profundidad. ¿Porqué?
Porque según estos estudios la ausencia de sol disminuye la distracción y nos permite concentrarnos mejor, y esto hace que mejore nuestra memoria y capacidad de procesamiento.

Y si después de leer esto, aún piensas que estar en casa los días nublados es una buena idea, te animo a comenzar con pequeños paseos en la naturaleza e ir descubriendo poco a poco el encanto de un día encapotado y sus beneficios.
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